¿Qué es un delito de cuello blanco?

Los delitos de cuello blanco reciben su nombre porque a menudo están relacionados con los ámbitos de los trabajadores de cuello blanco, como las finanzas, la política o los negocios. Sin embargo, no se limita necesariamente a este tipo de trabajadores. Un delito de cuello blanco se considera un acto delictivo no violento cometido con la intención de obtener un beneficio económico ilícito. Los delitos de cuello blanco suelen ser más sofisticados y requieren un análisis jurídico complejo. Debido a su naturaleza compleja, los delitos de cuello blanco pueden ser difíciles de procesar, pero esto no impide que los fiscales intenten arrojar todo lo que tienen a un presunto delincuente.

¿Qué es un delito de cuello blanco?

El hecho de que un delito de cuello blanco se defina como un acto delictivo no violento que se comete con la intención de obtener un beneficio económico ilícito significa que se trata de una categoría bastante amplia que incluye una variedad de posibles cargos penales. Los delitos de cuello blanco son una categoría amplia que incluye una larga lista de delitos específicos. Los delitos que se consideran de cuello blanco incluyen:

  • Malversación
  • El robo de identidad
  • Chantaje
  • Soborno
  • Extorsión
  • Falsificación
  • Crimen organizado
  • Uso de información privilegiada
  • Lavado de dinero
  • Corrupción pública
  • hurto mayor
  • Evasión de impuestos
  • Piratería (robo de propiedad intelectual)

Los delitos de cuello blanco también suelen implicar cargos de fraude como:

  • Fraude financiero
  • Fraude de seguridad
  • Fraude empresarial
  • Fraude de Medicare
  • Fraude a la seguridad social
  • fraude fiscal
  • Fraude de correo
  • Fraude electrónico
  • Fraude de marketing masivo

Ser condenado por cualquiera de estos delitos de cuello blanco puede tener un gran impacto en su vida personal y profesional. Su reputación corre el riesgo de verse manchada indefinidamente. Las penas más específicas dependerán, por supuesto, de la naturaleza del delito. Los delitos de cuello blanco van desde delitos menores de Clase B hasta delitos graves de Clase C. Cada categoría de delito conlleva sus propias sanciones potenciales, tales como:

  • Delito menor de clase B: una condena puede resultar en tres meses de prisión y $500 en multas.
  • Delito menor de clase A: una condena puede resultar en un año de prisión y hasta $1,000 en multas.
  • Delito grave de clase E: una condena puede resultar en cuatro años de prisión y hasta $5,000 en multas.
  • Delito grave de clase D: una condena puede resultar en hasta siete años de prisión y hasta $5,000 de multa
  • Delito grave de clase C: una condena puede resultar en hasta 15 años de prisión y hasta $5,000 en multas.

Si bien existen ciertas pautas que el tribunal debe observar al evaluar las penas por el delito, existe cierta discreción. Por ejemplo, un tribunal puede optar por imponer una multa igual o doble a la cantidad que el acusado ganó como resultado del delito en lugar de imponer la pena máxima por el delito. También puede haber circunstancias atenuantes o factores correctivos que llevarían al tribunal a imponer las sanciones potenciales más bajas prescritas por las pautas de sentencia.

Abogado defensor penal dedicado a luchar contra cargos de delitos de cuello blanco

Enfrentar un delito de cuello blanco significa que usted enfrenta sanciones potenciales severas. Es posible que le aguarden penas de prisión y grandes multas. Además, una condena penal de cuello blanco en su historial lo seguirá por el resto de su carrera. Este tipo de delitos tienden a tener graves impactos negativos en la vida social y financiera de quienes son condenados. Los dedicados y experimentados abogados especializados en delitos de cuello blanco de CDH Law lucharán para ayudar a evitar que ese cargo penal de cuello blanco se convierta en una condena penal. Póngase en contacto con nosotros hoy.